Jackie es de Bristol y tiene su ileostomía permanente desde septiembre de 2015
La ileostomía me devolvió la vida
Tras 2 años de lucha en los que me realizaron una ileostomía temporal tuve un segundo cáncer que me llevo a tener un colon corto. A consecuencia de esto llevaba una dieta muy restringida y sufría muchos dolores, hasta que finalmente en 2015 acepté realizarme una ileostomía permanente. Esto me devolvió la vida, al principio tuve algunas dificultades con las fugas debido a las cicatrices de mi primera ileostomía, pero las enfermeras estomaterapeutas fueron brillantes y pronto me solucionaron el problema. Ya estaba acostumbrada a cambiar la bolsa por mi experiencia anterior, así que eso nunca fue un problema.

Ya no me siento rara cenando fuera... puedo comer casi de todo
Ahora puedo asistir a actos sociales, como a la comida de Navidad con el grupo de mi iglesia a la que llevaba años sin poder asistir ya que no podía comer prácticamente nada. Además, ahora me encanta que mis amigos me inviten a comer a sus casas, antes no iba porque no quería ser la rara que llevase su propia comida y molestase a los demás. Ya puedo comer casi todo lo que quiero, aunque evito los frutos secos y el maíz dulce y tengo en cuenta las verduras que producen gases.
Tengo cuidado con lo que como cuando juego al golf
Juego al golf un par de veces a la semana y siempre estoy pendiente de lo que como durante los partidos para que la bolsa no se llene antes de llegar al hoyo 19, pero no me ha supuesto ningún problema más haya de esto, sigo golpeando bien la bola sin preocuparme de que se me despegue la bolsa.
Damos largos paseos y normalmente comemos un picnic a mitad de camino y siempre voy al baño antes de volver a salir. He desarrollado una especie de radar para localizar siempre el baño más cercano y tengo una tarjeta que indica que tengo derecho a utilizar los baños accesibles para que siempre me dejen usar el baño, pero hasta ahora no he tenido que usarla, nunca me han puesto problemas para usar el baño.
Este año por primera vez después de la operación, mi marido y yo vamos a viajar al extranjero, pero no me preocupa el cómo manejar mi ostomía.